Este proceso involucra muchos factores de diferente índole como ser agronómicos, climáticos, tipo de proceso y postcosecha entre otros, incluyendo toda una gran cadena de producción y procesamiento, que busca encontrar mayores alternativas para el café en cuanto a perfil de taza y estabilidad en la calidad del café.
Esto permite tener más y mejores opciones para ofrecer al mercado.
Es un proceso que requiere tiempo, dedicación, disciplina y que los productores estén dispuestos a romper paradigmas en cuanto al procesamiento de cafés tradicionales e introducirse en la producción de cafés de especialidad.